La música es estridente, la espalda bien formada esta
contrayéndose para terminar la melodía que ha creado en la batería junto a
otros tres chicos. Las alas en sus omoplatos se mueven como si estas pudieran,
de alguna manera, alzarse en vuelo llevándolo lejos. Aun por encima de la
multitud.
Su cara en perfecta concentración cae y muestra una sonrisa
cuando el último sonido muere en su instrumento de manera gloriosa, el fuego a
su alrededor ilumina su rostro empapado de sudor. El sudor que habla de cumplir
uno de sus sueños.
Sabe que el espectáculo acabo, que de un momento a otro será
hora de despertar a su realidad. Aun así, en ese momento lo único que puede
hacer es saborear la libertad que su cuerpo cansado le ofrece.
Baja de la plataforma en la que está, sonriendo. El pasillo
no le parece tan interminable como horas atrás en que lo recorría, al
contrario. En esta ocasión es tan corto que tiene que detenerse para no chocar
con el chico de trenzas frente a él.
Musita una disculpa, sabe que no puede hacer más pues están
esperándolo del otro lado. Tom ni siquiera se nota molesto mientras contesta con un “no hay problema”
siguiendo su camino en busca de una toalla para borrar el exceso de agua en su
cuerpo, sonriéndole a su baterista hasta que desaparece.
Gustav no lo ve como un exceso malo, es solo una pequeña
parte de la alegría saliendo de su cuerpo.
Georg pasa a su lado palmeando su espalda con una ancha
sonrisa, su cabellera lisa se pega a su frente dándole una apariencia extraña a
los ojos del rubio, quien contesta su sonrisa con una más discreta. El ojiverde
sabe lo que en el interior de Gustav burbujea
sin cesar, no necesita agregar que sus ojos marrones están brillando tanto de
emoción que inclusive pueden opacar a las estrellas que los acompañan esa noche.
El rubio sigue su camino, encontrándose con un cansado y a
la vez feliz Bill. Los ojos marrones de este capturan la mirada de Gustav con
complicidad típica de amigos de muchos años. No es como la relación de los
gemelos, pero el baterista sabe que en los ojos del cantante esta un lo hiciste
bien que no necesita ser vocalizado.
Ambos se sonríen para después desviar la mirada, el
pelinegro preguntándose por que cada vez que intenta elogiar a Gustav este solo
rola los ojos, ¿cómo es que el baterista no mira lo que el cantante logra ver
en él?
Bill suspira dejando al rubio marchar, sintiéndose un poco
mal al saber que su amigo no cree en él como para aceptar lo hermoso que es,
más allá del aspecto físico.
Al fin el baterista llega a su destino, la puerta se abre
sin el menor ruido. Se dirige al baño y sin mirar a su alrededor enciende la
luz para buscar una toalla, la pasa por su rostro sintiendo como la sonrisa se va extendiendo.
Su reflejo la contesta haciendo que su ceño se contraiga con
algo de enojo en sus facciones. No entiende, no puede entender siquiera el cómo
esta con los demás cuando se nota el abismo que hay entre ellos.
Los gemelos son considerados perfectos, descendientes de
algún dios de la belleza (en algunos casos). Bill incluso más que Tom. Georg,
con su larga cabellera y esos picaros ojos verdes también es considerado bello,
pero ¿y él? Solo es el chico tímido de la batería.
Cada vez que sus ojos chocan con el reflejo se encuentra uno
y más defectos, sin embargo cuando esta tras su batería eso no parece importar.
Se siente libre a su manera, lejos de todo y de todos. Pero en este momento, se
encuentra mirándose y se siente peor que un ave cautiva.
—Si sigues pensando
demasiado terminaras por arrugarte.
Gustav respinga al
ser sacado de su trance de manera tan brusca, la búsqueda del culpable no dura
más allá de tres segundos cuando ve al chico de trenzas justo detrás de él. La
curiosidad gana en esos ojos y lentamente van entrecerrándose cuando Tom le
sonríe.
—No me arrugaré —.
Es su torpe respuesta.
—Claro, claro.
El gemelo mayor
hace un ademan sin prestarle más importancia, pero sus ojos vuelven a examinar
a Gustav curioso.
—Deja de verme así
—suspira el aludido —, sé que me miro pésimo.
—¿A qué tiempo te
refieres? —Tom ensancha su sonrisa al mirar la contrariedad pasar por el rostro
de Gustav, pero tan rápido como llega se va.
—Siempre.
—Sabes que no es
cierto —empieza el de trenzas, sin dejarse interrumpir por el baterista pues prosigue
rápidamente —, ¿es que no has notado que cuando sonríes parece que las chicas
se detienen solo para verte?
—Eso es porque no
estás tú o Bill, o incluso Georg cerca. —Inquiere rápidamente Gustav causando
que Tom golpee su frente aun brillosa.
Se acerca
deteniendo al rubio por los hombros para hacerlo voltear y encararlo después.
—Eres asombroso así
como eres Gustav —empieza a hablar dejando que sus ojos marrones capturen los
de su amigo —, y creo firmemente que no cambiaría nada en ti. Aun si pudiera.
Gustav lo mira
tratando de ocultar su sorpresa, Tom jamás se expresa así de nadie, ¿debería
creerle?
—Eso fue tan gay.
Tom niega
enérgicamente mientras suelta el agarre sobre el baterista, pero no se
arrepiente de lo que dijo porque sabe que es verdad. El rubio tiene algo que
jamás tendrá ni Tom, ni Bill ni Georg.
Gustav es increíble, solamente como él puede serlo.
Hola May. Sería mentira si te digo que no esperaba que escribieras sobre Gustav, sabía que lo estabas haciendo y busqué tu historia. Y aquí me tienes, gratamente complacida. Leí los breves minutos de autoreflexión que hace sobre su pertenencia a TH. Sabe que no es por su físico, tampoco por su carácter antisocial, pero Tom [tenía que ser él May?, pienso que podría haber sido Bill, jajaja] le recuerda que posee un enorme talento. La frase final -"fue tan gay"- es fabulosa, vi a Tom soltarlo como si Gus fuera un apestado, jajaja.
ResponderEliminarGracias por describir estos detalles [el movimiento de las alas tatuadas...], gracias por escribir.
Lia Luna.
Lia <3
EliminarOmg, tus palabras me llegaron (y mucho TwT). Y bueno, se que Bill pudo haber sido, pero siento que Tom puede ser capaz de hablar con el corazón y además es muy tierno -w- <3. Yo también lo mire así xD hahaha rompía la tensión del momento de manera cómica :)
Gracias por buscarme (no me gusta etiquetar personas, prefiero que mis historias salgan solitas por la vida (?))
Un abrazo Lia.
Besitos <3